Santiago 1: 12 Bienaventurado el hombre que persevera bajo la prueba, porque una vez que ha sido aprobado, recibirá la corona de la vida que {el Señor} ha prometido a los que le aman.
La Palabra de Dios nos enseña claramente que al Señor debemos pedirle en oración, y esto nos permite ver que a Dios le agrada bendecir a cada uno de sus hijos. Con confianza podemos pedir cosas diversas, y en su bondad Dios nos concede aquellas cosas que están de acuerdo a su voluntad perfecta...
Es muy importante que apreciemos y demos valor a aquello que Dios valora, que veamos las cosas como Él las ve, que oremos como Él desea y que hagamos lo que nos dice. Estas cosas demandan una buena comunión con el Señor y una conciencia real de sus bendiciones y planes.
El Señor Jesús nos ha alcanzado con Su gracia, nos ha dado salvación y ha impartido en cada uno de nosotros diversos dones para servir en su obra. Por eso debemos perseverar con gozo sirviendo al Señor, conscientes de que es por su poder y gracia que podemos hacerlo.
Ten presente, aunque el entorno sea complicado, todo eso es temporal, Jesús venció y ahora vive dentro de ti. El Señor mismo te recompensará aquí en la tierra, y en su reino venidero.
El apóstol Pablo experimentó muchas dificultades y obstáculos, enemigos y peligros, pero el Señor siempre lo fortaleció y él acabó su carrera con gozo. Adelante, el Señor está contigo, él nunca te abandonará.
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